En los últimos 30 años Chile se posicionó como líder global en decenas de productos y categorías. Pasamos de exportar US$7 mil a US$70 mil millones al año con una economía absolutamente abierta al mundo. Los datos no mienten, Chile está mucho mejor que antes en todos los indicadores de desarrollo humano. Nos transformamos en ejemplo de desarrollo y crecimiento en la región. Objetivo logrado, pero no suficiente para el futuro. ¿Qué rol jugará Chile en el mundo los próximos 30 años? ¿Cuál es nuestro propósito? Esto pareciera no estar en el debate. Lamentablemente hoy no tenemos un propósito común que nos una. Mucha ideología en un discurso que sólo nos divide. O es el Estado o el libre mercado “el que lo soluciona todo”.